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Lucas 2:9-15 La Biblia de las Américas

 

Los pastores y los ángeles

En la misma región había pastores que estaban en el campo[c], cuidando sus rebaños durante las vigilias de la noche. Y un ángel del Señor se les presentó, y la gloria del Señor los rodeó de resplandor, y tuvieron gran temor. 10 Mas el ángel les dijo: No temáis, porque he aquí, os traigo buenas nuevas de gran gozo que serán para todo el pueblo; 11 porque os ha nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es Cristo[d] el Señor. 12 Y esto os servirá de señal: hallaréis a un niño envuelto en pañales y acostado en un pesebre. 13 Y de repente apareció con el ángel una multitud de los ejércitos celestiales, alabando a Dios y diciendo:

14 Gloria a Dios en las alturas,
y en la tierra paz entre los hombres en quienes Él se complace[e].

15 Y aconteció que cuando los ángeles se fueron[f] al cielo, los pastores se decían unos a otros: Vayamos, pues, hasta Belén y veamos esto que ha sucedido, que el Señor nos ha dado a saber. 16 Fueron a toda prisa, y hallaron a María y a José, y al Niño acostado en el pesebre. 17 Y cuando lo vieron, dieron a saber lo[g] que se les había dicho acerca de este Niño. 18 Y todos los que lo oyeron se maravillaron de las cosas que les fueron dichas por los pastores. 19 Pero María atesoraba todas estas cosas, reflexionando sobre ellas en su corazón. 20 Y los pastores se volvieron, glorificando y alabando a Dios por todo lo que habían oído y visto, tal como se les había dicho.

21 Cuando se cumplieron los ocho días para circuncidarle, le pusieron por nombre Jesús, el nombre dado por el ángel antes de que Él fuera concebido en el seno materno.

 

UN ENCUENTRO CON LA PALABRA

 

 

 

REFLEXION

Por amor a ti.

Reflexiones cristianas diarias por CVCLAVOZ

El cual, siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse, sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres; y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz.

Filipenses 2:6-8 (RVR 1960)

¿Quién podría sacrificar su trono para convertirse en alguien común e incluso dar su vida por quienes no lo merecen?

Cuando el ser humano alcanza una clase social alta, se acostumbra a los lujos que este grupo le permite experimentar, pero cuando sus posibilidades se terminan le cuesta volver a una vida sin privilegios.

Es así como los seres humanos actuamos, pero alguien hizo la diferencia a esta situación, Aquél que siendo Dios renunció a su gloria y poder en obediencia a su Padre, convirtiéndose en un ser humano y sacrificó su vida por nosotros.

Pero la pregunta es: ¿Por qué lo hizo? ¿Qué le impulsó a dejar su trono para morir en la cruz? La respuesta se traduce en esta promesa:

Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. Juan 3:16 (RVR 1960)

Quizá nunca has experimentado el amor de un padre, porque no lo conociste o simplemente ha estado tan ocupado que descuidó a un hijo maravilloso como tú. Cualquiera sea la situación, déjame decirte que no hay mayor amor en este mundo que el de Dios.

Porque siendo Rey, murió por ti para darte la oportunidad de conocer el verdadero amor de un padre y quien aún siendo tentado en todo, no conoció pecado. No merecía la muerte que se le dio, no merecía sufrir por nosotros, pero Él eligió la vía dolorosa, todo por amor a ti y a mí.

Si siendo Rey estuvo dispuesto a morir por nosotros, ahora la pregunta que deberíamos de hacernos es: ¿Qué estoy dispuesto a hacer yo por Él?

¿Has experimentado el amor de Dios en tu vida? No te quedes con ello y aprovecha este tiempo para darlo a conocer a quienes lo necesitan.

Ruth Mamani

CVCLAVOZ



 

UN ENCUENTRO CON LA PALABRA

 

 

 

REFLEXION

Él está vivo.

 

 

 

Reflexiones cristianas diarias por CVCLAVOZ

Luego, cuando volvieron a reunirse en Galilea, Jesús les dijo: «El Hijo del Hombre será traicionado y entregado en manos de sus enemigos. Lo matarán, pero al tercer día se levantará de los muertos». Y los discípulos se llenaron de profundo dolor.

Mateo 17:22-23 (NTV)

Jesús les dijo a sus discípulos con anticipación que Él iba a morir y resucitar al tercer día. Sin embargo, ellos no entendieron lo que quiso decir, porque cuando sucedió lo que Jesús había predicho, los discípulos estaban lamentándose y llorando.

Incluso cuando María Magdalena, a quién Jesús se apareció primeramente después de resucitar, les dijo a los discípulos que el Señor vivía y había estado con Él, no le creyeron. Después Jesús se apareció a otros dos discípulos, quienes también fueron y lo hicieron saber a los demás, y ni aun así ellos creyeron.

Finalmente se apareció a los once mismos, estando ellos sentados a la mesa, y les reprochó su incredulidad y dureza de corazón, porque no habían creído a los que le habían visto resucitado.

Marcos 16:14 (RVR1960)

Esta es una de las primeras reacciones que muchos tienen sobre la resurrección de Jesús, dudan de que sea verdad. Al igual que el apóstol Tomás quieren una evidencia física, “No lo creeré a menos que vea las heridas de los clavos en sus manos, meta mis dedos en ellas y ponga mi mano dentro de la herida de su costado.” Juan 20:25 (NTV)

Actualmente eso no sucederá porque Jesús ya resucitó, ascendió al cielo y tiene un cuerpo glorificado y Él mismo dijo que era conveniente que se fuera, que su presencia estaría con nosotros, que irá a prepararnos un lugar y que cuando esté listo volverá a buscarnos.

Al igual que dijo a los discípulos que moriría y resucitaría, nos dice a nosotros que Él está vivo y que pronto volverá.

Si aún dudas de la resurrección de Jesús y del acto de amor más grande y puro que alguien podría hacer por ti, lee la palabra de Dios y creer en las escrituras.

Entonces le dijo a Tomás: Pon tu dedo aquí y mira mis manos; mete tu mano en la herida de mi costado. Ya no seas incrédulo. ¡Cree! - ¡Mi Señor y mi Dios! - exclamó Tomás. Entonces Jesús le dijo: Tú crees porque me has visto, benditos los que creen sin verme. Juan 20:27-29 (NTV)

Eres bienaventurado(a) si crees y confías en Jesús plenamente. Agradécele este día por todo lo que hizo por ti y glorifícale, porque Él vive por los siglos de los siglos.

Diego Jora

CVCLAVOZ