Jueces 3:12-13 La Biblia de las Américas (LBLA)

Aod libra a Israel de Moab

¹²Volvieron los hijos de Israel a hacer lo malo ante los ojos del Señor. Entonces el Señor fortaleció a Eglón, rey de Moab, contra Israel, porque habían hecho lo malo ante los ojos del Señor. ¹³Y Eglón reunió consigo a los hijos de Amón y de Amalec; y fue y derrotó^[n] a Israel, y se apoderaron de la ciudad de las palmeras. ¹⁴Y los hijos de Israel sirvieron a Eglón, rey de Moab, por dieciocho años.

¹⁵Pero los hijos de Israel clamaron al Señor, y el Señor les levantó un libertador, a Aod, hijo de Gera, benjamita, el cual era zurdo. Y los hijos de Israel enviaron tributo con él^[o] a Eglón, rey de Moab. ¹⁶Aod se hizo una espada de dos filos, de un codo^[p] de largo, y la ató a su muslo derecho debajo de la ropa. ¹⁷Y presentó el tributo a Eglón, rey de Moab; y Eglón era un hombre muy grueso. ¹⁸Y aconteció que cuando terminó de presentar el tributo, despidió a la gente que había traído el tributo.¹⁹Pero él se volvió desde los ídolos que estaban en Gilgal, y dijo: Tengo un mensaje secreto para ti, oh rey. Y éste dijo: Guarda silencio. Y todos los que le servían salieron. ²⁰Aod vino a él cuando estaba sentado solo en su sala de verano^[q]. Y Aod dijo: Tengo un mensaje de Dios para ti. Y él se levantó de su silla. ²¹Aod alargó la mano izquierda, tomó la espada de su muslo derecho, y se la hundió en el vientre. ²²Y la empuñadura entró también tras la hoja, y la gordura se cerró sobre la hoja, pues no sacó la espada de su vientre; y se le salieron los excrementos.²³Entonces salió Aod al corredor, cerró tras sí las puertas de la sala de la terraza y les pasó el cerrojo.

²⁴Después de haber salido, vinieron los siervos y miraron, y he aquí, las puertas de la sala de la terraza tenían pasado el cerrojo, y dijeron: Sin duda está haciendo su necesidad^[r] en la sala de verano^[s]. ²⁵Y esperaron hasta sentir inquietud^[t], pues he aquí que él no abría las puertas de la sala de la terraza. Entonces tomaron la llave y las abrieron, y he aquí, su señor caído en el suelo^[u], muerto.

²⁶Mas Aod había escapado mientras ellos esperaban; pasando por los ídolos, había escapado a Seirat. ²⁷Y^[v] cuando llegó, tocó la trompeta en la región montañosa de Efraín; y los hijos de Israel descendieron con él de la región montañosa, estando él al frente de ellos. ²⁸Y les dijo: Perseguidlos, porque el Señor ha entregado en vuestras manos a vuestros enemigos, los moabitas. Y descendieron tras él y se apoderaron de los vados del Jordán frente a Moab, y no dejaron pasar a nadie. ²⁹En aquella ocasión mataron a unos diez mil moabitas, todos hombres robustos y valientes; ninguno escapó. ³⁰Y fue subyugado Moab aquel día bajo la mano de Israel. Y la tierra tuvo descanso por ochenta años.

UN ENCUENTRO CON LA PALABRA

REFLEXION

¿Es La Psicología Moderna Contra La Consejería Biblica?
Publicado por: Pastor Carlos Vargas Valdez en Preguntas y Respuestas Cristianas, Respuestas Cristianas 0

¿Usted ha oído el término “psicología moderna?” Si usted no lo escucho, usted no está solo. La psicología de hoy es muy diferente a la que se practicó hace sólo unas décadas. El principal objetivo de la psicología moderna es comprender a los individuos y grupos. Esto lo hace mediante el establecimiento de principios fundamenteales a través de la investigación mediante el uso de normas humanas.

Esto se hace con la idea de beneficiar la salud y el bienestar de todos, pero ¿es eso posible?

La psicología moderna consiste en al menos tres cosas:

El estudio científico de la mente humana y sus funciones, especialmente las que afectan el comportamiento en un contexto dado; Las características mentales o la actitud de una persona o grupo de personas; Y los factores mentales y emocionales que rigen una cierta situación o conducta.

Existen varias categorías de psicología, como la Psicología Biológica, la Psicología del Comportamiento, la Psicología Cognitiva. Además están la Psicología Humanística, la Psicología Transcultural, la Psicología Psicodinámica e incluso la Psicología Evolutiva. Esta trata de explicar cómo la evolución podría explicar procesos psicológicos específicos que tienen lugar en la evolución de la humanidad.

El problema con todas estas categorías específicas es que ninguna de ellas responde a las necesidades espirituales de la persona o de las personas y todo lo que no está unido a la consejería bíblica es sólo más de la misma filosofía humana de auto-perfeccionamiento por medios humanos. Al final, todo se reduce a nada. No estoy hablando de consejería bíblica o psicología que se inclina hacia la escritura, sino de una psicología separada de Dios que ni siquiera tiene a Dios en el cuadro. Sin Dios, todos los esfuerzos humanos terminarán en futilidad.

El Consejo de Amigos.

La Biblia habla mucho sobre la consejería, algunas de ellas son buenas, pero algunas son MUY malas. Bien el salmista escribió:
“Bienaventurado el hombre que no anda en el consejo de los impíos, ni se interpone en el camino de los pecadores, ni se sienta En el asiento de los escarnecedores “(Salmo 1: 1).

Si buscas consejo de los impíos, obtendrás el consejo impío, pero yo prefiero, el “Bendeciré a Jehová que me aconseja; Aun en las noches me enseña mi conciencia”(Salmo 16:7).

El consejo del Señor permanece para siempre, los planes de su corazón por todas las generaciones “(Salmo 33:11).

La consejería enfocada en humanismo durará solamente un tiempo, pero el consejo de Dios permanece para siempre porque está basado en la verdad de la Palabra de Dios, por esto el salmista dijo de Dios:

“Me has guiado según tu consejo, Y después me recibirás en gloria.” (Salmo 73:24).

No estoy diciendo que la consejería no es buena. Puede ayudar mucho. Muchos matrimonios han sido salvados por el consejo matrimonial, pero debe estar basado en la verdad objetiva de la Palabra de Dios y no en la verdad subjetiva de la psicología moderna.

Salomón sabía que “Donde no hay dirección sabia, caerá el pueblo; Mas en la multitud de consejeros hay seguridad” (Prov. 11:14), ya que “los planes son establecidos por el consejo” (Prov.20:18).

Antes de que las personas tomen decisiones importantes que cambien su vida, siempre es aconsejable compartir sus planes con los demás porque “No hay sabiduría, ni inteligencia, Ni consejo, contra Él Señor.” (Proverbios 21:30), así que si estás aconsejandote con un cristiano, debería ser alguien que ha recibido entrenamiento bíblico. De esta manera es más probable que usted reciba un consejo de Dios que viene del hombre.
Los consejeros bíblicos no suelen “negarse a declarar todo el consejo de Dios” (Hechos 20:27), pero si no es un consejo con una perspectiva santa, entonces no llegará a nada al final.

El Consejo de Dios.

Tal vez usted ha tenido consejería bíblica antes. Tal vez fue por un problema en el matrimonio o en una relación o incluso por saber que desición tomar, pero a menos que esté en la Palabra de Dios, estará sobre la arena del mar. Cualquier consejo sin referirse a las Escrituras es por última instancia. Isaías, el Profeta, escribió:

“Acérquese, y venga el consejo del Santo de Israel, para que lo sepamos!” (Isaías 5:19).

Nuestro consejo puede ser bueno o malo, pero Dios declara: “Mi consejo permanecerá, y cumpliré todo mi propósito” (Isaías 46:10).

El antiguo Israel rechazó el consejo de Dios por medio de los profetas que Dios envió, como Jeremías, quien escribió:
“No obedecían ni inclinaban sus oídos, sino que caminaban en sus propios consejos y en la obstinación de sus malos corazones. (Jer 7:24), así que él pregunta, “¿Se ha acabado el consejo en los sabios? ¿Se corrompió su sabiduría? “(Jer 49:7) Parece que sí … y hoy, no es muy diferente. Rechazamos el consejo de Dios que se encuentra en las Escrituras y tomamos nuestras propias creencias, y a menudo, es contrario a lo que dice la Palabra de Dios.

Consejería Bíblica.

Si un consejero no basa su consejo en el fundamento de la Palabra de Dios, entonces usted tiene consejería no bíblica que no le ayudará. Ahora si hay un consejo basado en la Palabra de Dios, este consejo debería ser seguido con la confirmación del Señor.

Una pareja que había estado viviendo juntos por más de 14 años buscó consejo sobre algo que habían estado pasando. Fue una circunstancia difícil, pero la razón por la que esta pareja estaba pasando por tantos problemas es porque estaban tratando de agradar a Dios e incluso buscando el consejo de Dios, pero se negaban a arrepentirse de su vida de inmoralidad sexual.

Después de decirles lo que la Biblia dice acerca de tener relaciones sexuales fuera del matrimonio y que necesitaban arrepentirse de eso y vivir en casas separadas hasta que se casaran, me acusaron de ser estrecho de mente y atrapado en el primer siglo, pero no estaba atrapado en el primer siglo; Era el fundamento seguro de la Palabra de Dios hablando.

Les dije lo que la Biblia dice sobre su estilo de vida, pero ellos justificaron lo que estaban haciendo por razones financieras. Finalmente renuncié a darles consejos porque estaban rechazando el consejo de Dios y apoyándose en lo que leían sobre la psicología moderna. No era mi consejo que estaban rechazando. Era el consejo de Dios en su Palabra. Siempre me he preguntado qué les pasó.

Conclusión.

Por supuesto, todos necesitamos consejo, pero tiene que ser un consejo de Dios y basado en la Palabra del Señor, o sólo será una opinión humana. No se puede colgar el sombrero sobre la opinión del hombre, porque cambia con el tiempo, pero con la Escritura, tenemos un estándar inmutable sobre el cual podemos basar nuestra vida y saber que no cambia con el pasar de los años.

La Palabra de Dios será tan verdadera en un millón de años como lo será mañana, eso es reconfortante.

Ningún consejo de Dios hará daño a nadie, pero rechazar el consejo bíblico es rechazar a Dios y su Palabra. Nosotros sabemos por experiencia que esto no terminará bien. No es en vano que el proverbio dice:

“Hay camino que al hombre le parece derecho; Pero su fin es camino de muerte”(Prov 14:12).

UN ENCUENTRO CON LA PALABRA

REFLEXION

Venciendo los gigantes de mi vida

¿Alguna vez te has sentido incapaz de solucionar un problema?

Justamente esa es la definición de la impotencia. El diccionario define más exactamente como la falta de fuerza o poder para realizar una cosa o hacer que algo suceda. Esto trae un profundo dolor emocional por el hecho de no poder remediar una situación desagradable. En otras palabras, te sientes impotente, cuando sabes que los problemas son más grandes que comparado con tus fuerzas, sólo te resta decir “No puedo”.
“Y añadió el filisteo: Hoy yo he desafiado al campamento de Israel; dadme un hombre que pelee conmigo. Oyendo Saúl y todo Israel estas palabras del filisteo, se turbaron y tuvieron gran miedo.” 1 Samuel 17:10-11

Cuando te sientes impotente te ves a ti mismo como inferior, sientes temor y tal vez puedes llegar a turbarte como le pasó al pueblo de Dios. Entonces comienzas a pensar que no podrás librarte de aquella dificultad y que no hay solución posible para tal situación.

Cada día el gigante Goliat salía para amenazar al pueblo de Dios, hasta que apareció alguien con otro pensamiento.

“Entonces dijo David al filisteo: Tú vienes a mí con espada y lanza y jabalina; mas yo vengo a ti en el nombre de Jehová de los ejércitos, el Dios de los escuadrones de Israel, a quien tú has provocado.” 1 Samuel 17:45

La actitud de David frente al gigante fue muy diferente porque aunque reconocía que el gigante a enfrentar era muy fuerte, también sabía que mucho más poder y grandeza tenía Dios. Debemos entender que Él no nos ha llamado a luchar solos, es posible que los problemas nos superen, ya que somos humanos, pero estos nunca serán más grande que nuestro Dios.

“Y Jehová va delante de ti; él estará contigo, no te dejará, ni te desamparará; no temas ni te intimides.” Deuteronomio 31:8
Tal vez estés atravesando una situación difícil semejante a enfrentar un temible gigante, este ya no se llama Goliat sino que tiene distintos nombres; enfermedad, deudas, adicciones, divorcio, depresión etc. estos se presentan cada día a tu vida, atemorizándote y llenándote de incertidumbre acerca del futuro. Seguramente y ante esta situación te sientes pequeño,
impotente y sin fuerzas.

Si es así, te invito a que hagas la siguiente oración: “Señor, sé que solo no puedo, humanamente me siento pequeño delante de este problema tan grande, quiero pedirte perdón por las veces que decidí ir solo a la batalla, pero hoy te pido que me ayudes a pelear, a no escapar del problema, sino a enfrentarlo y salir victorioso. Ahora sé que no voy desamparado a la batalla, al igual que David diré: Gigante, yo vengo a ti en el nombre de Jehová de los ejércitos. Amen.”

Si confías en Dios y le obedeces, Él te sorprenderá haciendo lo que tú en tus fuerzas no podías.

Shirley Chambi
CVCLAVOZ